Lo primero que te sugerimos para prevenir los pinchazos, es que realices revisiones periódicas del estado de tu moto. Para eso, lo más importante, es controlar la presión de los neumáticos.
Con la ayuda de un manómetro podrás controlar si ha variado o no la presión de los neumáticos. Es aconsejable realizar la medición en frío cada dos semanas. Las herramientas que pueden servirte para realizar esta operación pueden costar entre 10 y 150 euros.
Además puedes servirte de algunos artículos que han ido saliendo al mercado para proteger tus neumáticos, como algunas capas protectoras para el interior del neumático que mediante centrifugación, si se produce un pinchazo, tratan de sellar la grieta. Su precio oscila entre 10 y 30 euros.
Cada cierto tiempo, deberás cambiar los neumáticos, ya que, aunque cuides todos los detalles, estos tienen un ciclo de vida limitado, tras el cual no es recomendable circular. Cuando el dibujo empieza a desaparecer la calidad comienza a disminuir; es entonces cuando se debe buscar un repuesto.
Si con todos estos cuidados, no podemos evitar aún así un pinchazo, al menos podremos aliviar el problema si llevamos algunas herramientas adecuadas, para averías no graves, como “equipos de reparación” que vienen preparados con todos los elementos necesarios. Pueden costar entre 10 y 40 euros.
Y si necesitas asistencia, no olvides hacer una llamada a tu aseguradora de moto.
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