Además de las caídas o los impactos de piedras o gravilla, el frío y la lluvia son dos de los grandes enemigos de las manos del motorista. Afortunadamente cada vez existen soluciones más eficientes para su protección, como es el caso de los guantes calefactables moto.
Los guantes de moto son un elemento imprescindible dentro de la equipación del motorista. Existen diferentes tipos de guantes dependiendo de la disciplina para la que estén indicados o la época del año en que deben usarse. En el caso de los guantes calefactables moto, obviamente, están pensados para ser utilizados durante las épocas más frías del año.
A continuación analizamos las características de los guantes calefactables de moto y las ventajas que ofrecen para la protección de las manos del motorista.
¿Qué son exactamente los guantes calefactables de moto?
Los guantes calefactables de moto se caracterizan por tener un sistema de calor incorporado, que generalmente consiste en una o dos baterías y cargadores para cada una de ellas. Una vez que las baterías están cargadas, proporcionarán calor a los guantes como si dispusieran de un pequeño radiador, lo que permite mantener las manos calientes.
Los primeros guantes calefactables incluían baterías que se debían guardar en la chaqueta o en alguna parte de la equipación del motorista, pero los más actuales ya incorporan espacio para acoplar la batería e incluso ofrecen la posibilidad de regular la temperatura de forma manual desde el propio guante. A continuación vemos más a fondo cuáles son algunas de sus principales ventajas.
¿Qué ventajas ofrecen los guantes calefactables moto?
La primera ventaja, la más evidente, es que nos permiten mantener las manos calientes al circular en moto los días de frío y lluvia. Ya existen guantes de moto especiales para el invierno pero muchos de ellos o no ofrecen el suficiente aislamiento o reducen la sensibilidad al tacto con el manillar.
Los guantes calefactables más actuales ofrecen un rendimiento inmediato. Una vez los ponemos en marcha, en menos de medio minuto empezaremos a notar como los guantes comienzan a alcanzar temperatura. Generalmente suelen tener tres o cuatro posiciones distintas: apagado, baja potencia, potencia media y máxima potencia.
La mayoría de guantes calefactables incorporan varios jacks para cargar a la vez varias baterías, y también un enchufe internacional para poder cargar la batería en cualquier lugar. Cargar las baterías en casa no nos llevará más de un par de horas (dependiendo del modelo).
Estos guantes suelen tener una autonomía que ronda las cuatro horas. Sin embargo, cabe citar que no es necesario tener la batería encendida todo el tiempo, ya que son capaces de aislar y mantener el calor, es decir, si se apagan o se acaba la batería mientras vamos conduciendo no se enfrían repentinamente.
En definitiva, se trata de una solución innovadora en lo que se refiere a la protección de las manos y el confort del motorista y en una prenda ideal para proteger las manos del frío durante el invierno.
También te puede interesar:
Los guantes para ir en moto en verano son imprescindibles
Somos especialistas en seguros de moto. Aquí encontrarás todas las novedades y contenidos de interés relacionados con el mundo de las dos ruedas.
Pingback: Frío en moto: complementos para tu equipamiento - Blog de motos y noticias del sector