Proceso de restauración de motos clásicas

¿Tienes una moto clásica muy antigua o estás pensando en comprar una para restaurarla? Si es así, desde AMV te damos unos consejos de restauración de motos clásicas que te ayudarán a dejarla como nueva. ¡Toma nota!

Sin duda, la restauración de motos clásicas es una experiencia única. En algunos casos, la misma es realizada por los propietarios del vehículo. Y en otros, estos últimos confían dicho proceso a expertos en la materia. Una sabia decisión si no se dispone del conocimiento, las herramientas y el espacio adecuado para tal fin.

Si estás pensando en restaurar una moto clásica, desde el blog de motos y quad de AMV te ofrecemos unos consejos que pueden ayudarte a dejar esa moto antigua y llena de polvo como nueva. Toma nota de estos 10 pasos y… ¡buena restauración!

1. ¿Dónde comprar una moto clásica para restaurar?

Obviamente, el proceso de restauración de motos clásicas comienza con la adquisición del vehículo. En ocasiones, la moto clásica es propiedad de la familia o de un conocido y se encuentra abandonada a su suerte en un garaje o el patio de la casa de un pueblo. Si es así, no será necesario buscar en el mercado. Además, quizás haya suerte y se conserve documentación del vehículo…

Pero si no contamos con una moto clásica para restaurar y nos vemos en la obligación de adquirirla, tenemos varias vías para hacerlo:

• Salones y mercadillos de vehículos clásicos. Representan la opción más tradicional y facilitan contactar con compraventas y propietarios.
• Páginas web y foros de Internet. En la Red hay páginas exclusivas y de anuncios donde se puede adquirir una moto clásica. Y también puntos de encuentro virtuales en los que se ponen a la venta vehículos clásicos y es posible interactuar con otros aficionados.
• Subastas. Otra opción interesante. En plataformas como Catawiki y mercados de antigüedades como Todocolección, por poner algunos ejemplos, podremos pujar por motos clásicas.

Nuestro consejo es que te lo tomes con calma. Y que en el proceso de adquisición de una moto clásica cuentes con el asesoramiento de un mecánico de confianza. Sobre todo si, una vez comprado, se encargará de la restauración del vehículo. Por cierto: intenta adquirir una moto completa.

2. Papeles de la moto clásica: ¿lo tenemos todo?

Como comentábamos anteriormente, en la restauración de motos clásicas pueden conservarse los papeles de la moto o no… Si no disponemos de la documentación o nos falta algún papel, antes de restaurar una moto que no sea nuestra es conveniente conocer su situación legal. ¿Está embargada? ¿Cómo figura en Tráfico: dada de alta o de baja temporal o definitiva?

Llegados a este punto, nuestra recomendación es que te pongas en manos de una gestoría especializada. Una vez que facilites el número de matrícula o bastidor de la moto clásica, sus profesionales se encargarán de solicitar un informe del vehículo a la Dirección General de Tráfico (DGT). Y te asesorarán sobre las gestiones que habrán de realizar para que la moto pueda circular legalmente.

3. Información de la moto: manual, libros, revistas…

Un detalle muy importante a la hora de restaurar una moto clásica es la información que se disponga del modelo en cuestión. El manual de usuario o instrucciones nos será de utilidad. Asimismo, en el mercado se venden libros de determinados vehículos clásicos que incluyen información detallada de su historia y datos mecánicos o de accesorios de interés.

Si pretendes que la moto clásica que deseas restaurar recupere el esplendor de antaño, pregunta en librerías especializadas, motoclubes o foros. Contar con un manual original, libros o revistas te será de gran ayuda para que vuelva a lucir como el primer día.

4. Primer examen: ¿cómo se encuentra el motor?

En la restauración de motos clásicas es muy importante contar con un presupuesto económico. Y para hacernos una idea de cuánto tendremos que invertir, lo primero que debemos hacer es interesarnos por la salud del corazón del vehículo. ¿Cómo se encuentra el motor? ¿Arranca? ¿O está trabado o gripado?

Si el motor no se pone en marcha, ¿qué dice tu mecánico de confianza? ¿Serán necesarias operaciones de rectificado y mecanizado de piezas? ¿Interesa repararlo o es mejor comprar uno similar en el mercado de ocasión?

5. Desmontaje y clasificación de todas las piezas

En función del estado del motor, podrás hacerte una primera idea de qué presupuesto te hará falta para restaurar tu moto clásica. Una partida económica que se irá incrementando a medida que se vayan revisando el resto de piezas de la moto. Una vez examinado el propulsor, sigue los siguientes pasos:

• Fotografía todas las piezas. Toma planos generales y detalles. Las fotos podrán ser de utilidad cuando recompongas el vehículo o para consultar su estado con el mecánico o un especialista en restauración de motos clásicas.
• Una vez que desmontes todas las piezas, es aconsejable clasificarlas y etiquetarlas.
• Cuando tengas un listado detallado de las mismas, precisa cuáles son reutilizables y qué piezas tendrás que comprar.

De esta manera, tu proyecto de restauración empezará a cobrar forma. Y empezarás a tener más claro cuánto dinero será preciso invertir en él. ¡No te desanimes!

6. Mecánica y electricidad: confía en profesionales

Como verás, desde el principio del presente post venimos insistiendo en la necesidad de contar con un mecánico de confianza. Su labor es esencial para restaurar una moto clásica en parte o su totalidad. Sobre todo en lo relativo a la mecánica y la electricidad.

Si quieres que tu moto clásica sea segura, un experto se encargará de evaluar elementos de la seguridad activa como los frenos y las suspensiones. De igual modo, tocará revisar el embrague, la caja de cambios y la transmisión. Y ya puestos, toda la instalación eléctrica y comprobar que los grupos ópticos, la instrumentación y los mandos funcionan correctamente. ¿Te atreves tú solo?

7. Un proceso artesanal que requiere paciencia

En la restauración de motos clásicas también hay que tener en cuenta todo lo referente al chasis, el depósito de combustible, los guardabarros o las llantas. Si no hay que reemplazar alguno de estos componentes por otros ya restaurados, prepárate para lijar, arenar o moldear antes de pintar.

Y, naturalmente, habrá que prestarle atención a detalles como la tapicería del asiento o los cromados. Como verás, hablamos de un proceso artesanal que requiere tiempo. No tengas prisa: suele decirse que la paciencia es la mejor virtud. ¡Ánimo, ya falta menos!

8. Neumáticos especiales: ¡el toque final!

Ya que nos hemos referido a las llantas, ¡cálzalas en neumáticos específicos! En el blog de AMV encontrarás un interesante artículo sobre neumáticos para vehículos clásicos. La oferta es amplia y te será fácil encontrar las cubiertas que mejor se adapten a tu moto clásica.

9. Montar las piezas y… ¡moto restaurada!

Ya tienes todas las piezas restauradas. ¡Buen trabajo! Pero ahora llega una de las fases del proceso más críticas: montarlas en su sitio y lograr que todas encajen a la perfección. Ante cualquier duda, rescata las fotografías que le hiciste a la moto antes de desmontarla.

Y una vez completada y restaurada, ¿estás nervioso? ¿Quieres arrancarla y escuchar el sonido que emana de sus escapes? Si el proceso de restauración ha sido satisfactorio, ¡te parecerá música celestial! Puedes sentirte orgulloso: has recuperado una auténtica joya del motor.

10. Documentación y seguro: todo en regla

Pero, recuerda: para poder disfrutar de moto clásica restaurada, debes contar con los papeles en regla. Como indicábamos en el segundo paso, una gestoría especializada se encargará de todo. Y por las características y antigüedad de la moto, te dirá si conviene matricularla como moto histórica.

Finalmente, en AMV podrás asegurar tu moto clásica o histórica. Puedes elegir entre varias modalidades y ampliar la póliza con las coberturas que necesites. Calcula tu presupuesto online y contrata tu seguro en solo 3 minutos. ¡Así de sencillo!