Embrague Antirrebote: ¿Qué es y cómo funciona?

Reservado inicialmente a las motos de gran cilindrada, el embrague antirrebote se ha popularizado y cada vez son más los modelos que lo incluyen. Si quieres saber qué es exactamente y cómo funciona, ¡sigue leyendo!

Gracias a las diferentes tecnologías innovadoras que incorporan, las motos son cada vez más seguras. Entre ellas, como ya hemos visto en el blog, se encuentra el embrague antirrebote. Si no sabes qué es, para qué sirve, cómo funciona y cuáles son sus principales ventajas, tranquilo: te lo explicamos todo en este post.

¿Qué es el embrague antirrebote?

Pero antes de entrar en detalles conviene aclarar qué es el embrague, del que ya nos hemos ocupado en el artículo dedicado a las partes de una moto.

• Hablamos de un componente cuya finalidad es conectar y desconectar el cigüeñal del motor a la caja de cambios.
• Y esta última, a su vez, se encarga de transferir el par motor a la rueda trasera, a través de una transmisión secundaria, para que se ponga en movimiento.

Mediante el embrague es posible subir o cambiar de marcha, facilitando así que la caja de cambios pueda adaptar el par motor a las necesidades de velocidad y fuerza conforme a las circunstancias. Y en las motocicletas con caja de cambios manual se gestiona accionando la maneta izquierda del manillar.

En cuanto a qué es el embrague antirrebote, se trata de una evolución cuya popularidad se debe a su uso en MotoGP. En lo referente a las motos de calle, primero empezó a montarse en modelos de gama alta. Y actualmente ya es posible disfrutarlo en todos los segmentos. Pero, ¿para qué sirve exactamente?

¿Para qué sirve el embrague antirrebote?

Como veremos a continuación, al reducir de marcha se produce un desfase entre la velocidad de giro del motor y la del vehículo. En esos casos llegan producirse bloqueos y rebotes de la rueda posterior que pueden ocasionar una caída.

Así pues, este tipo de embrague sirve para evitar esto último. En definitiva, su misión es contribuir a garantizar la estabilidad de una motocicleta en situaciones críticas de conducción.

¿Cómo funciona el embrague antirrebote?

Como se ha comentado, el embrague es una parte fundamental de la moto. Ello es así porque facilita cambiar de marcha y transmitir el par motor adecuado al eje motriz. Pero en algunas circunstancias podría ponernos en un apuro. Por ello, vamos a ver cómo funciona el embrague antirrebote y cuál es su contribución a la seguridad de los motoristas:

• Al realizar cambios descendentes a altas revoluciones con un embrague tradicional, la rueda trasera aumenta su velocidad respecto al giro del motor.
• De manera instintiva, se tiende a frenar. Ello se traduce en una transferencia del peso al tren delantero.
• Y, por ende, esa mayor incidencia en el eje anterior propicia un menor peso en el eje posterior que da lugar a bloqueos o rebotes de la rueda trasera que suponen un riesgo para la conducción.
• Por el contrario, un sistema antirrebote minimiza ese peligro. Al deslizarse y desembragar automáticamente, consigue aminorar la velocidad de la rueda.
• De esta manera, reduce el efecto rebote, consigue que el comportamiento de la moto sea más estable y previene posibles caídas.

Al margen de la competición, estos embragues comenzaron a montarse en modelos de alta cilindrada. Algo lógico al ser más potentes y, por lo tanto, representar un mayor riesgo en los casos de pérdida de agarre del tren trasero. Pero hoy en día, los mecanismos antirrebote se han generalizado. Tanto es así que forman parte del equipamiento de muchas motos de 125 cc.

Ventajas del embrague antirrebote

Por lo expuesto, queda claro que la principal ventaja de un embrague antirrebote es su aportación a la seguridad de los motoristas. Sin duda, es una ayuda a la conducción muy relevante. Y si lo analizamos más detalladamente, veremos que sus beneficios son muchos. ¡Toma nota!

• Para empezar, enriquece el equipamiento de seguridad activa de una motocicleta.
• En consecuencia, mejora el comportamiento del vehículo evitando bloqueos, rebotes y pérdidas de adherencia en la rueda trasera.
• Con este tipo de embrague, el desgaste y la probabilidad de causar daños a la transmisión son menores.
• Otra de sus ventajas tiene que ver con la suspensión. Concretamente, con la trasera. Al montar un sistema antirrebote, la amortiguación posterior de la moto trabaja más eficazmente.
• De igual manera, este mecanismo ayuda a que el trazado de curvas sea más estable y seguro.
• Finalmente, no exige una técnica de conducción específica. Algo muy de agradecer, puesto que no disminuye la capacidad de atención y posibilita concentrarse en lo que sucede en la vía. ¿Sabías que las distracciones al conducir causan más del 30% de los accidentes de tráfico?

Desventajas del embrague antirrebote

Como sucede con otras tantas cosas, los sistemas antirrebote tienen sus pros y contras. Como habrás visto, aportan numerosos beneficios. Pero también presentan algunas desventajas. Entre ellas, las siguientes:

• Un embrague antirrebote tiene un precio mayor. A pesar de ello, afortunadamente, no es un componente que encarezca el coste de adquisición de forma notable.
• En algunos casos, el desgaste puede provocar que se tenga la sensación de circular en punto muerto durante unos instantes. Si es así, tocará revisar el sistema.
• Para algunos motoristas, su accionamiento es menos suave que el de un embrague convencional.
• Si no forma parte del equipamiento de serie y se desea instalar, su montaje debe delegarse a un servicio oficial posventa o un taller de confianza. De otro modo, los resultados podrían no ser los esperados.

¿Qué puede suceder si no tienes embrague antirrebote en tu moto?

En definitiva, llegado el momento de estrenar una moto nueva o comprar una moto de segunda mano es importante interesarse por su equipamiento de seguridad activa. Y preguntarle al vendedor si el modelo en cuestión monta un sistema antirrebote.

Si no equipa dicho mecanismo, es recomendable participar en un curso de conducción segura impartido por una escuela solvente. Sus profesionales se encargarán de enseñarnos nociones sobre cómo accionar el embrague correctamente cuando se reduce de marcha a un régimen de revoluciones alto.

Ciertamente, es un aprendizaje esencial para evitar bloqueos, pérdidas de adherencia y rebotes en el tren trasero. Ello es así porque cualquiera de estas respuestas de la moto, además de darnos un buen susto, puede propiciar una caída.

¿Cómo te protege un seguro de moto en caso de accidente?

Y es en situaciones como estas cuando se agradece contar con un seguro de moto que incluya la cobertura de Accidentes del Conductor:

• Según datos de la patronal Unespa, casi el 78% de los motoristas españoles cuenta con un seguro de moto que incluye dicha garantía. Algo que no es de extrañar, pues los moteros pertenecen a un colectivo considerado vulnerable en materia de seguridad vial.
• Esta cobertura brinda protección a un motorista cuando sufre un accidente de tráfico sin contrario, es atendido en un centro sanitario y este último le reclama los gastos de la asistencia médica.
• Igualmente, la garantía de Accidentes del Conductor cubre en casos de incapacidad o fallecimiento.

Si tu también formas parte de los que pensamos con el casco y deseas disfrutar de tu pasión con seguridad, pásate a AMV, el seguro de los especialistas en 2 ruedas. Contrata tu seguro con garantías especialmente diseñadas para motoristas ya incluidas.

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