Hablar de los motores de dos tiempos es hacerlo de mecánicas muy particulares. ¿Quieres saber cómo son, cómo funcionan y cuáles son sus principales ventajas? Si es así, te lo explicamos todo en este post. ¡Toma nota!
En el blog de AMV ya hemos detallado cuáles son las principales partes de una moto. De todas ellas, el propulsor es el auténtico corazón del vehículo. Centrándonos en este componente, vamos a ocuparnos del funcionamiento del motor de dos tiempos. Un tipo de mecánica que, a pesar de haber caído en desuso, continúa contando con numerosos adeptos.
Entre ellos, los aficionados a las motocicletas antiguas. Si eres de estos últimos y tienes que contratar un seguro de moto clásica, en AMV te lo ponemos fácil. Puedes elegir la modalidad que mejor se adapte a ti. Y personalizarla con las coberturas de Accidentes del Conductor y Asistencia en Viaje. En solo 3 minutos. Así de sencillo. ¿A qué esperas para calcular el precio de tu póliza?
Índice
¿Qué es un motor de dos tiempos?
Cuando se habla de un motor de dos tiempos se hace referencia a un tipo de propulsor que reúne las siguientes características:
- Se trata de un motor de combustión interna.
- Realiza las cuatro fases del ciclo termodinámico (admisión, compresión, combustión y escape) en solo dos movimientos lineales del pistón (subida y bajada).
- Por lo tanto, se produce una combustión por cada vuelta del cigüeñal.
Originarios del siglo XIX, estos motores se han desarrollado tanto en ciclo Otto como en diésel, que deben sus nombres a los ingenieros alemanes Nikolas August Otto y Rudolf Diesel, respectivamente.
Deportivamente, los motores de dos tiempos vivieron una época dorada en el Mundial de Velocidad hasta 2001. ¿Quién no recuerda motos como la icónica Honda NSR500 que hizo campeones a Álex Crivillé y Mick Doohan? A partir de 2002, la categoría reina de 500 cc pasó a denominarse MotoGP, iniciándose así la era de las cuatro tiempos.
En la actualidad, como se comentaba al inicio del presente post, los motores de dos tiempos son propios de las motos clásicas e históricas. Del mismo modo, son utilizados en algunos ciclomotores y motos de campo. Y también en karts y motos de agua.
Funcionamiento del motor de dos tiempos
En cuanto al funcionamiento del motor de dos tiempos, lo primero que conviene saber es que necesitaremos una mezcla de gasolina y aceite.
¿Cómo se hace una mezcla de gasolina y aceite?
A diferencia de una mecánica de cuatro tiempos, donde actúan por separado, aquí tendremos que juntar combustible y lubricante. Según los expertos, en estas proporciones por cada litro de mezcla:
- 98% de gasolina sin plomo de 95 octanos.
- 2% de aceite especial para motores de dos tiempos.
Es decir, en cada litro de mezcla hay que añadir 20 mililitros de lubricante. Si no sabes cómo hacerlo, toma nota:
- Para facilitar esta operación, algunos envases de aceite incluyen un dosificador que ayuda a medir dicha cantidad.
- Y otra opción es adquirir un vaso o jarra graduados en establecimientos como ferreterías o grandes almacenes de bricolaje.
Una vez realizada la mezcla, tocará batirla para asegurarse de que el aceite se integra bien en la gasolina. Gracias a dicho aditivo, se garantizará una correcta lubricación de las paredes del cilindro y el pistón.
Esto es de suma importancia para evitar rozamientos en la cámara de combustión y, por ende, impedir que el motor acabe gripándose. De lo contrario, tendríamos que hacer frente a una reparación muy costosa.
Una vez explicado lo relativo a la mezcla, vamos a centrarnos en las fases del funcionamiento del motor de dos tiempos.
Primer tiempo: fase admisión-comprensión
El pistón asciende verticalmente desde el punto muerto inferior (PMI) hasta la culata. En su recorrido abre la lumbrera de admisión para que entre la mezcla de aire, combustible y lubricante. Al final de su carrera se produce la compresión. Y en la parte de abajo se llena el cárter con la mezcla.
Segundo tiempo: fase explosión-escape
Cuando el pistón alcanza el punto muerto superior (PMS), una chispa provocada por la bujía incendia la mezcla comprimida y se genera una combustión que empuja el pistón hacia abajo. La mezcla es precomprimida en el cárter por el pistón y se abre la lumbrera de escape para que salgan los gases y las ondas acústicas al exterior. Llegados a este punto, el cilindro queda preparado para un nuevo ciclo.
La fuerza lineal generada por el pistón es transmitida a una fuerza rotatoria a través del cigüeñal. Y este inicia el trasvase de energía a la rueda motriz mediante rodamientos y engranajes que pasan por el embrague y la caja de cambios o el variador.
Partes de un motor de dos tiempos
Como habrás visto, de garantizar el funcionamiento del motor de dos tiempos se encargan una serie de piezas. Hablamos de partes fijas y móviles.
Partes fijas del motor de 2T
En un propulsor de dos tiempos se encuentran las siguientes partes fijas:
- Culata. Es la pieza metálica que se ajusta al bloque del motor y cierra el cuerpo del cilindro por uno de sus extremos. Además, soporta la bujía y forma parte de la cámara de combustión.
- Bujía. Ubicada en la parte superior del cilindro, produce la chispa eléctrica para inflamar la mezcla gaseosa (encendido).
- Cilindro o camisa. Es el alojamiento cilíndrico, fundido en hierro o aluminio, en cuyo interior se desplaza el pistón.
- Cárter. Esta caja metálica aloja y protege algunos elementos operativos del motor. La pieza empleada en las motos suele estar fabricada con chapa de acero o aluminio.
Partes móviles del motor de 2T
Y, además de las anteriores, para que un propulsor de estas características pueda funcionar debe contar con estas partes móviles:
- Pistón o émbolo. Esta pieza de aleación se desplaza verticalmente en el interior del cilindro o camisa para comprimir el fluido y desplazar el movimiento a la biela.
- Biela. Esta, por su parte, tiene el cometido de transmitir el movimiento del pistón al cigüeñal.
- Cigüeñal. Por último, un cigüeñal es un eje con codos que transforma un movimiento rectilíneo en circular o viceversa.
Ventajas de un motor de dos tiempos
Aunque también sea de combustión interna, el funcionamiento del motor de dos tiempos es muy diferente al de cuatro tiempos. Y, en comparación con este último, presenta estas ventajas:
- Como tienen menos elementos mecánicos –entre ellos, carecen de válvulas de admisión y escape–, estos motores son más sencillos y económicos de mantener. Y, por lo general, presentan menos averías.
- El hecho de que se registre una explosión cada vez que el pistón asciende se traduce en una mayor potencia y un par motor más uniforme y regular.
- Al no haber lubricante en el cárter pueden trabajar en cualquier posición.
- Son más eficientes desde el punto de vista termodinámico. Ello es así porque la combustión de la mezcla de aire y combustible-lubricante genera menos temperatura.
Pero, lógicamente, los motores de dos tiempos también tienen desventajas… Entre ellas, un mayor consumo, más emisiones contaminantes debido a la presencia de aceite en la mezcla, un desgaste de las piezas superior y una eficiencia menor.
En definitiva, un motor de dos tiempos genera una explosión por cada vuelta del cigüeñal. Y solo requiere dos fases para funcionar. Además, se alimenta de una mezcla de gasolina y aceite que, por cierto, produce un olor único e inconfundible que recordarán los lectores más veteranos.
Soy un apasionado de las competiciones del motor y he trabajado y colaborado con algunos de los medios de comunicación más importantes de España, especializándome en este sector. Además, me interesan mucho los temas relacionados con la seguridad vial.